Durante 2018 se han revitalizado las expectativas sobre las inversiones en energía solar fotovoltaica. La normativa que viene parece más favorable y atractiva para las inversiones futuras. A partir de 2019 toca consolidar y estabilizar estas expectativas rentabilizando al máximo la inversión pero sin olvidarse de poner al servicio de las personas la tecnología más avanzada.

La prueba de todo esto es que los fabricantes de inversores incrementan sus ventas a pasos agigantados, se abarata el precio del Wp (watio pico) e incluso aumentan las plantillas de empresas dedicadas al diseño, instalación, asesoramiento y mantenimiento de sistemas fotovoltaicos.

En un contexto en el que se están terminando de definir las “reglas del juego” para los años venideros, la monitorización, el control y el mantenimiento de las grandes plantas FV se muestran como elementos críticos que deben venir acompañados de una buena gestión de los activos y en particular de los activos existentes.

La Gestión de activos (Asset Management) de plantas solares FV es por tanto una pieza clave para consolidar la inversión realizada en activos y servicios fotovoltaicos.

Claves de la gestión de activos inteligente

En las industrias fotovoltaicas el asset management se debe fusionar con la operación y el mantentimiento para que la gestión sea integral.

Por tanto es necesario incluir mecanismos que validen los modelos de negocio tanto en la zona de inversión (CAPEX) como en la zona de operación y gasto (OPEX), moviendo así el ciclo completo del activo para situarlo en el punto óptimo en el que produzca el mayor rendimiento posible con el menor esfuerzo.

Para gestionar de manera inteligente la gestión de estos activos es necesario realizar un proceso de mejora continua que tenga en cuenta áreas claves para el funcionamiento de las plantas solares como son:

  • Mantenimiento preventivo apoyado en calendarios que facilitan la organización de los trabajos a realizar.
  • Mantenimiento correctivo ligado a la resolución de incidencias y la reducción de tiempos de intervención, teniendo en cuenta parámetros poco tangibles como la profesionalización, la estandarización y la clarificación de interlocutores utilizando workflows de proceso.
  • Mantenimiento predictivo, que se anticipe los problemas que puedan surgir a partir de las variables de mantenimiento anteriores y apoyándose en los registros históricos que hacen mas fácil fijar los objetivos.
  • Gestión de repuestos y almacenes, proporcionando un plan logístico ajustado a las necesidades del momento que logra reducir el impacto de la reparación.
  • Planes Normativos para el cumplimiento de la regulación vigente respecto inspecciones, garantías, seguros, etc.
  • Validación de procesos a través de auditorías internas.
  • Facturación y cobro, utilizando información financiera clara para reforzar las inversiones realizadas y demostrando la reducción en costes de operación .
  • Unificación herramientas y aplicaciones utilizando la gestión documental como el motor común que dota de inteligencia a todo el sistema.
  • Integración tecnológica con tecnologías “open source” utilizadas en los diferentes elementos de las instalaciones.

Mejora continua FV

En un entorno complejo como este es conveniente además utilizar mecanismos de intercambio de información como los que proporciona la metodología BIM, a través de la cual distintos actores operan bajo un mismo formato de intercambio de información que permite agilizar los procesos de cada instalación.

Retos en la gestión

El verdadero reto en el sector fotovoltaico es transformar sus activos existentes en activos inteligentes:

  • Tenemos la obligación de adaptar al marco actual las instalaciones (grandes y pequeñas) que se construyeron años atrás.
  • Tenemos la posibilidad de que las nuevas instalaciones cuenten con la mejor gestión de activos para modernizar los modelos de O&M tradicionales.
  • Tenemos la tecnología adecuada para facilitar la gestión de activos y validar la inversión en energía solar fotovoltaica.

La plataforma Retain cuenta con las herramientas precisas que apoyan la labor de coordinación y dirección necesaria para sincronizar y encaminar el binomio inversión-mantenimiento  hacia la consecución de los objetivos marcados de la manera más eficiente.

En este sentido adquirimos un verdadero compromiso alineado con los grandes retos planteados para  cualquier proyecto en energías renovables:

El asset management contribuye a la sostenibilidad del planeta siendo participes de una economía circular incipiente a través de la cual se exprime al máximo la vida del activo.