Según una noticia publicada en El País, en 2017 “una decena de grupos empresariales controlan más de 4.400 restaurantes en España”. En el creciente sector de la restauración, el “food service” ha pasado de estar atomizado a aglutinarse y concentrarse en un número reducido de empresas que controlan un gran número de establecimientos.

Para un grupo inversor resulta atractivo y financieramente posible disponer de 300 o 400 puntos de venta dispersos funcionando de manera homogénea. Sin embargo, la gestión de esos activos dispersos puede ser tanto un problema como una oportunidad.

La estrategia de marketing, la organización de los activos nuevos y existentes y la interrelación entre ellos son las claves para conseguir el éxito en un sector donde la competencia ya está siendo feroz.

BIM: Inteligencia aplicada al sector de la restauración

Parece claro que un sector en auge merece la atención debida. Por tanto, para canalizar la deslocalización de los puntos de venta es necesario repensar una estrategia potente que permita despegar de manera cohesionada y eficaz a los grupos empresariales que han optado por la inversión en el modelo “food service”.

Indudablemente para hacer funcionar multitud de restaurantes se debe contar con una herramienta de mantenimiento que diagnostique con precisión el estado actual, en tiempo real, tanto de cada uno de los establecimientos como del global de la cadena. Desgraciadamente, las herramientas tradicionales de mantenimiento que en su momento se vieron sobrepasadas por la era de la tecnología vuelven a quedarse atrás debido a los nuevos conceptos de organización.

En este sentido, aplicar la metodología BIM sobre activos existentes y trasladarla al sector de la restauración supone una propuesta atractiva e innovadora para acompañar el rápido crecimiento que está experimentando el sector.

Desde el momento en el que se asume BIM como hoja de ruta para desarrollar y gestionar activos, estos pasan a llevar pegado el adjetivo “inteligente”. Es decir, activos inteligentes gestionados de manera eficaz  para que aporten valor desde el mismo momento de su concepción hasta su desaparición.

Nuevos retos, herramientas novedosas

La visión integral que se propone desde el modelo BIM debe estar sustentado por aplicaciones informáticas que ayuden a cohesionar toda la información relacionada para que le llegue en cada momento al interlocutor adecuado.

Con la herramienta adecuada, una incidencia puede ser notificada automáticamente para que  sea resuelta en tiempo record por el mantenedor asociado y a la vez sea evaluada con los pertinentes filtros de control por los responsables designados, solicitando presupuestos, validando y aceptando el más adecuado según criterios definidos, evaluando la calidad de la reparación y del servicio, historizando los problemas repetitivos y reportando toda la información al mas alto nivel ejecutivo para tomar las decisiones estratégicas que correspondan.

Para llevar a cabo estos procesos, las herramientas propuestas deben estar sustentadas por potentes bases de datos y sistemas de seguridad que  permitan un tratamiento de la información que, si bien hasta ahora ha sido bastante plano, comienza a adquirir dimensión propia enfocada al servicio de la mejora continua y la productividad  ligada a la facturación.

 

Estamos ante un magnífico reto, que no es otro que el de consolidar y afianzar el crecimiento del sector. Disponemos de la tecnología adecuada y sobre todo contamos con la inteligencia necesaria para transformar por completo el “food service”. Las posibilidades son infinitas. ¿Te interesa? Descubre Retain.